CERRAJERÍA

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CERRAJERÍA

Publicado 29 noviembre, 2012

El mercado español de cerrajería ha vivido un ejercicio de 2011 similar al anterior, con una balanza comercial favorable a las importaciones, volcado en la reposición, luchando contra el mercado chino e introduciendo algunas novedades. En este sentido, la tendencia europea de introducir cerraduras electrónicas en el mercado está siendo mucho más lenta en nuestro país.

El incremento del valor del mercado español de cerrajería ha sido bastante imperceptible, en general, durante 2011, con una balanza comercial en la que se importa más de lo que se exporta. El usuario particular es el foco de atracción principal para los productos de baja calidad-bajo precio, que provienen especialmente de China y que tienen como canal estandarte de distribución las tiendas de “todo a un euro”. Las marcas sólidas son las que generan mayor confianza en el usuario profesional.

 

Perfil del sector

El sector de cerrajería y herrajes engloba los siguientes productos:

Cerraduras, candados, cajas de caudales, llaves y partes de candados, cerraduras y cerrojos blindados para cámaras acorazadas, cofres y cajas de seguridad y artículos similares, de metales comunes. Herrajes, guarniciones y bisagras de cualquier clase, incluido los pernios.

Según el último informe sectorial publicado por el ICEX, el sector español de cerrajería, con una plantilla media por empresa de 37 personas, está integrado por unas 86 empresas, de las que un 80% son pymes y alrededor de un 15% poseen una plantilla superior a los 50 trabajadores

Es un sector muy activo, que se ha reestructurado incorporando nuevas tecnologías y diseños, para adaptarse a los cambios continuos del mercado.  En 2010 el sector alcanzó los 3.800 puestos de trabajo directos y un volumen de negocio de 420 millones de euros.

Las empresas del sector mantienen gran actividad exportadora, suponiendo ésta en muchos casos más del 40% de su facturación.  La producción española está localizada en pocas áreas geográficas. En concreto Cataluña, el País Vasco y la Comunidad Valenciana concentran conjuntamente el 80% del total de las empresas.

El proceso de fabricación, la calidad de la materia prima, los diseños, el respeto de las normas internacionales de calidad, la fiabilidad del producto, la atención personalizada, así como un precio competitivo son los puntos fuertes del sector.  Por otra parte, la copia de diseños y productos, por parte de los países asiáticos, está provocando una pérdida de competitividad en las empresas españolas, que cuentan con costes productivos más elevados y realizan un esfuerzo constante en innovación.

Balanza Comercial

Los proveedores españoles que mejores resultados están obteniendo son aquellos que derivan parte de su producción a la exportación, en muchos casos más del 40% de lo que fabrican. Aun así, la balanza comercial española de cerrajería es favorable a las importaciones que a las exportaciones.

Durante el primer trimestre del pasado año 2011, según datos del ICEX, el valor de  las importaciones de productos de cerrajería y herrajes superó los 120 millones de euros, frente a los casi 90 millones de euros que supusieron las exportaciones, con lo que el déficit de la balanza en los primeros trimestres de 2011 fue de unos 30 millones de euros, favorables a la partida de importaciones, continuando la pauta marcada en 2010.

En 2010, las importaciones han superado a las exportaciones en más de 162 millones de euros, tónica ésta que ha sido así en los últimos años, especialmente en 2007 y 2009, con un balance favorable a las importaciones, superior en los dos casos a los 270 millones de euros.

La cifra arrojada por las exportaciones de productos españoles de cerrajería en 2010 ha rondado los 350 millones de euros.

Exactamente, según datos del ICEX, la exportación del sector español de cerrajería en 2010 ha sido de 349.388.000 euros, y los principales mercados a los que han llegado nuestros artículos, por orden de importancia, han sido: Francia, Portugal, Alemania, Italia, Reino Unido, Turquía, Bélgica, México, Países Bajos y Rusia.

Estos países hablan de la calidad de nuestros artículos, ya que entre los cinco primeros, por ejemplo, encontramos mercados muy potentes, con grandes fabricantes y distribuidores y usuarios muy exigentes.

 Auge de otros canales

Los fabricantes han desarrollado productos eficaces, seguros y estéticamente aceptables. El problema es que estos productos no siempre llegan al consumidor final, por lo que se debe mejorar su distribución a través de canales especializados.

Durante los últimos años, el sector se ha caracterizado por su gran desarrollo y por la profesionalización de sus clientes, que compran a través de ferreterías especializadas y suministros industriales. Aunque parte de sus productos se distribuyen a través de la industria del bricolaje: en cadenas de grandes superficies y cadenas de tiendas, donde el cliente puede acceder a la fase del producto “hágaselo usted mismo” y escoja todo lo que le interese”. El concepto de la pequeña ferretería tradicional como cliente privilegiado, está perdiendo terreno.

Por la gran variedad de productos que el sector ferretero y el bricolaje engloban, se produce una integración con diversos sectores que también actúan como canales de distribución.

En primer lugar se puede citar a los fabricantes de muebles, puertas y ventanas. En segundo lugar, al sector de materiales de construcción, para el acabado de la vivienda y a los sectores eléctrico y de fontanería. Y en tercer lugar, el sector de accesorios y complementos para la madera en general.

Mecánica o electrónica

El éxito de la implantación masiva de la cerradura electrónica no parece que llegará a corto plazo. La crisis ha afectado a este sector también, lógicamente, y  la situación actual no es la mejor para cambiar de sistemas. Sin embargo, la cerrajería electrónica es una realidad, especialmente en Europa, en muchos casos combinando el producto con la mecánica, y en España se está haciendo llegar, paulatinamente, al usuario final.

Las soluciones mecánicas son mayoría en nuestro mercado, y posiblemente siga siendo así durante mucho tiempo. El fabricante que opera en nuestro mercado desarrolla soluciones mecánicas eficaces, con un coste más bajo.

Tendencias en Europa

La última edición de la Feria de Ferretería de Colonia, celebrada en marzo de 2012, ha dejado ver las tendencias que afloran en Europa en el sector de cerrajería y herrajes. En el certamen se expuso una gran oferta de cerraduras, aparatos y dispositivos de seguridad, de alarma y antirrobo.

Dada la creciente necesidad del usuario de tener un sistema de seguridad adecuado, los fabricantes insisten en las innovaciones constantes, complementando sistemas. Es decir, la electrónica complementa a la mecánica, pero no la sustituye.

La oferta en feria ha estado protagonizada por la presencia de novedades en segmentos como sistemas de vídeo, dispositivos anti-incendios y antirrobo, controles de acceso, sistemas de cierre, seguridades adicionales y cajas fuertes, destacando los nuevos sistemas de cierre eléctrico, que se activan al introducir un código.

También se han presentado productos como los mecanismos de cierre automático con función integrada para evitar el pánico, conscientes de que la seguridad en el hogar es algo que cada vez está más presente.

Las nuevas cajas fuertes que llegan al mercado ofrecen una gran variedad, desde cajas para joyas hasta estructuras fijas para colocar armas. Los sistemas de cierre se caracterizan por ser de alto nivel, con una tendencia cada vez mayor a pasar de la mecánica a la electrónica. Uno de los principales argumentos de compras de los clientes del sector de cerrajería y herrajes es el diseño que caracteriza a los productos. En las manillas, picaportes y herrajes en general, el acero inoxidable es el material a destacar.

Importancia de la UCES

Unión Cerrajeros de Seguridad  – UCES es la única federación de asociaciones profesionales de cerrajería de seguridad a nivel estatal. Se constituyó en 2009 bajo la iniciativa de las principales asociaciones del sector: Asmace, Cerracor, Grupo Cerrajero y Grupo Vicuña.

La UCES está muy centrada en la formación interna, con la colaboración de fabricantes, abogados y profesorado especializado, que han formado a las empresas.

En la actualidad están registrados más de 300 profesionales y 200 empresas, si bien, desde la federación se hace un gran esfuerzo para incrementar este número ya que hay muchos profesionales que aún no son conscientes de la necesidad de formar parte de una asociación. En España se calcula que hay alrededor de 2.000 profesionales del sector, y es importante llegar a la mayoría de ellos.

Por otra parte, el Gremio de Cerrajeros de España GRECER XXI, ha emprendido un nuevo proyecto basado en potenciar una de las herramientas más poderosas actualmente como es la Información Telemática.
Se trata de la puesta en servicio para todos  sus agremiados e interesados en general del sector de las Puertas Metálicas y sus Automatismos, de esta potente herramienta, que permitirá realizar con suma sencillez el cumplimiento documental que conlleva el correcto marcado “CE” de las Puertas Automáticas y poder cumplir con los procesos de registros tanto de los Instaladores Autorizados como de todas las instalaciones puestas en funcionamiento, los contratos de mantenimiento en curso, así como el seguimiento y estado de las Inspecciones Técnicas Periódicas realizadas por los OCA como proceso de control y de auto-regulación sectorial.

Internacionalización de la Federación

En la línea de compartir conocimientos y aprender de las experiencias de otras asociaciones europeas, UCES -Unión de Cerrajeros de Seguridad- se presentó recientemente en Lisboa el proyecto de auto-regulación de UCES -Unión Cerrajeros de Seguridad- ante más de 200 empresas y representantes de la Associação Portuguesa de Empresas de Chaves e Sistemas de Segurança –APECSS.
A las dos entidades les unen objetivos similares, como son la profesionalización, la regulación empresarial y profesional del sector, la promoción y el fomento de la formación básica y especializada del personal.
José Luis García de Vicuña, presidente de Grupo Vicuña y vicepresidente de UCES, hizo entrega de un Certificado Honorífico de Acreditación a UCES y la correspondiente placa profesional a Jorge Almas, Presidente de APECSS.
El acto se celebró en las instalaciones de la Asociación APECSS, y se encuadra dentro de las actividades que lleva a cabo UCES con el fin de difundir las actividades y objetivos de la Federación.

Por otra parte, coincidiendo con la Feria Internacional de Seguridad en Vilnius (Lituania), fue presentada la UCES -Unión Cerrajeros de Seguridad- a todos los representantes del GRUPO LOCKMASTER, este grupo está formado por especialistas de reconocido prestigio internacional, con representantes de casi todos los países de Europa y América.

Entendimiento fabricante-cerrajero

Según fuentes de la UCES, el entendimiento entre el fabricante y el cerrajero profesional es bastante bueno, en especial con algunos fabricantes que se dieron cuenta de que su producción se debía distribuir por dos líneas independientes: los productos convencionales, a través del canal ferretero, que lo lleva hasta los carpinteros y metalistas; y los sistemas de seguridad, a través de cerrajeros especializados.

Es importante la colaboración  entre fabricantes y cerrajeros profesionales para certificar conjuntamente la adecuada utilización de los sistemas de apertura y cierre, su instalación y protección.

Problemas del profesional

El principal problema del cerrajero es la falta de regulación, que afecta, principalmente, de tres maneras: primero, la seguridad del cliente, que no sabe a qué profesional ha contratado y no puede comprobar su identidad: algo tan básico como conocer que la persona que está abriendo su casa o instalando un nuevo sistema de seguridad no tiene antecedentes penales. Puede darse el caso de estar contratando a un delincuente.

Segundo, la seguridad del profesional, ya que cada vez se dan más casos en los que se utiliza la buena fe para cometer un delito, como acceder a viviendas alquiladas que el inquilino no paga o entrar en comercios o viviendas que no son de su propiedad, haciendo participe de un delito de allanamiento al cerrajero.

Y, por último, el intrusismo, que genera la desconfianza del cliente en la elección del profesional, dados los abusos demostrados y reiterados que se vienen observando.

Por otro lado, tienen importancia, y generan mala fama colectiva los abusos que aparecen en ocasiones., generalmente en los servicios de urgencia. En ocasiones, la necesidad del cliente hace que algunas empresas abusen.

La falta de regulación ha hecho que surjan muchas empresas que se anuncian en internet, páginas amarillas, pegatinas y otros medios, actuando como intermediarios y aumentado el precio soportado por el cliente hasta en un 200%, en muchos casos.

Estas empresas intermediarias son las que muchas veces contratan los servicios de profesionales poco cualificados, incluso personas que no están al corriente con sus responsabilidades tributarias, ya que su único objetivo es amortizar cada llamada que se hace a su anuncio, sin aportar ninguna garantía de servicio.

Desde la UCES informan de que hay muy buenas soluciones para protegernos, pero hace falta formación para que su instalación obtenga resultados óptimos. Hay que especializarse en la instalación de sistemas de seguridad. Lo demanda el mercado.

El cliente final, según fuentes de la UCES, es confiado. En muchos casos, tal vez por desconocimiento, ni pide ni exige nada, y eso va en su contra. Debería ser más exigente aun cuando se encuentre bajo la presión de buscar un profesional urgente. Es imprescindible decirle al cliente que cuando solicita un servicio ordinario o urgente, si no le dan un precio previo cerrado, puede acabar en manos de la empresa o el profesional menos indicado.